LAS ADELITAS

El papel de la mujer en la época de la revolución se les conocía como adelitas a las mujeres que acompañaban a sus esposo durante los combates, el papel de estas fue muy importante ya que no solo se desempeñaban como guerreras como muchos pensamos, ellas participaban en los contingentes militares de diferentes grupos revolucionarios, se desempeñaban como enfermeras, periodistas, transportadora de soldados, espía, transportaba correspondencia secreta y por no dejar de un lado hacia sus labores domésticas.

Las mujeres de la clase alta eran las únicas que tenían permitido permanecer en sus casas al cuidado de sus hijos, desde ese entonces podemos ver nuevamente la  gran desigualdad de niveles o clases sociales, por donde quiera que lo veamos siempre los pobres pierden más y pagan más que los ricos en este caso fue hasta la vida, salvo una excepción de una gran mujer, valiente. Su nombre fue Altagracia Martínez y se le conocía como Marieta Martínez, ella dejo la comodidad de su hogar de clase media para integrarse a la revolución.

Francisco I. Madero y Rodolfo Fierro fueron los famosos generales que la bautizaron con el sobrenombre “Adelita”. Fue Orozco quien la manda a matar. A ella fue a quien le compuso Enrique Segovia el corrido de “Adelita “

En lo alto de la abrupta serranía

acampado se encontraba un regimiento

y una moza que valiente los seguía

locamente enamorada del sargento.

Popular entre la tropa era Adelita

la mujer que el sargento idolatraba

y además de ser valiente era bonita

que hasta el mismo Coronel la respetaba.

Y se oía, que decía, aquel que tanto la quería:

Y si Adelita quisiera ser mi novia

y si Adelita fuera mi mujer

le compraría un vestido de seda

para llevarla a bailar al cuartel.

Y si Adelita se fuera con otro

la seguiría por tierra y por mar

si por mar en un buque de guerra

si por tierra en un tren militar.

Hay que recalcar que la mujer es sumamente importante, en cualquiera de sus épocas, pero no hubo como ninguna como en el año de 1910. Merecen un gran respeto al acto tan valiente y honroso que desempeñaron.