martes, 20 de enero de 2015

HOMBRES GENIOS: DALAI LAMA


Tenzin Giatso - Dalai Lama

Es el jefe espiritual del budismo tibetano, considerado por sus seguidores la reencarnación del bodhisattva Avalokitesvara.


Se trata, por tanto, de una dinastía de monarcas hereditarios, sino de la máxima magistratura personal de un régimen teocrático. 

En el interregno entre la muerte de un Lama y la mayoría de edad del siguiente, el Monasterio ejerce directamente el poder designando a un regente, al tiempo que se ocupa de la educación del futuro jefe.

Nació en una familia pobre de origen tibetano en la provincia china de Quinghai en 1935
. En 1950, cuando aún no había cumplido la mayoría de edad, los comunistas chinos invadieron el país; Tendzin Gyatso, declarado mayor de edad antes de tiempo, asumió el poder y se refugió cerca de la frontera con la India; pero, al no recibir ayuda exterior pese a su llamamiento a la India de Nehru y a las Naciones Unidas, hubo de aceptar la tutela comunista, firmando en 1951 un tratado que convertía al Tíbet en «provincia autónoma» de China.

Las relaciones con la China de Mao fueron muy conflictivas, luchando el Dalai Lama por preservar el sistema tradicional tibetano y los chinos por controlar el poder de hecho designando por sí mismos a un joven chino como la reencarnación del Panchen Lama.

En 1956 estalló una primera rebelión antichina en dos provincias fronterizas de población tibetana, que fue reprimida de forma sangrienta. En 1959 un levantamiento popular apoyado por el ejército se enfrentó a las tropas chinas, que respondieron violentamente hasta la total ocupación del país.

El Dalai Lama consiguió huir a la India con unos 70.000 exiliados tibetanos, mientras Mao ponía en el gobierno del Tíbet al Panchen Lama (al que sin embargo no consiguió manejar a su gusto y encarceló en 1964). En 1982 Deng Xiaoping invitó a regresar al Dalai Lama, que prefirió permanecer en el exilio, dedicándose a preservar en el norte de la India, Nepal, Bután y Sikkim la cultura tibetana destruida por las autoridades chinas en su país de origen, al tiempo que asumía públicamente los ideales de la democracia y el pacifismo.

Desde entonces ha venido testificando en todos los foros internacionales la pérdida de la soberanía de su nación, pero «se ha opuesto al uso de la violencia y ha propiciado soluciones basadas en la tolerancia y el respeto mutuo, con el objetivo de preservar la herencia histórica y cultural de su pueblo». 


Esta última cita textual pertenece al comité del Parlamento noruego que le concedió el premio Nobel de la Paz en 1989. En 1990 publicó su autobiografía, Freedom in Exile.



2 comentarios:

  1. Dalai Lama hombre admirable luchando por la igualdad, el respeto y la tolerancia, preicando siempre estos valores.
    Bien María

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  2. Así es Martita, un hombre admirable, que esta en contra del uso de la violencia y su testimonio lo hace basando en el respeto y tolereancia... Gracias por tu comentario

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